Enfermedades cardiovasculares

Promover hábitos de vida saludable y el cuidado de la salud para mejorar la calidad de vida de la población beneficiaria de la Obra Social y reducir la morbi-mortalidad por enfermedades cardiovasculares.

Objetivo del Programa:

Destinatarios:

Hombres y mujeres mayores de 30 años.

Guía de Atención:

Visite a su médico una vez al año, realizando un control general de su salud.

Hipertensión Arterial:

Es una enfermedad crónica que se caracteriza por el aumento de la presión sanguínea en las arterias, esta presión es la fuerza que ejerce la sangre sobre las paredes de las arterias.

El corazón bombea la sangre a través de una red de arterias, venas y capilares. La sangre en movimiento empuja contra las paredes de las arterias y esta fuerza se mide como presión arterial. La presión arterial alta es ocasionada por un estrechamiento de unas arterias muy pequeñas (arteriolas) que regulan el flujo sanguíneo en el organismo. A medida que estas arteriolas se estrechan o contraen, el corazón tiene que esforzarse más para bombear la sangre a través de un espacio más reducido y la presión dentro de los vasos sanguíneos aumenta.

Sin tratamiento, la hipertensión aumenta el riesgo de infarto o de un accidente cerebrovascular.

Cuando la causa que origina la hipertensión es desconocida se llama Hipertensión Primaria o Esencial, y cuando la causa es conocida normalmente está relacionada con alguna otra enfermedad y se la llama Hipertensión Secundaria.

¿Quiénes tienen mayor riesgo de tener Hipertensión Arterial?

Aquellos que tengan antecedentes familiares de hipertensión.
Los hombres, ya que en las mujeres el riesgo es mayor después de los 55 años.
Las personas mayores de 60 años.
Aquellos que tengan diabetes.

¿Cuáles son los factores de riesgo?

Niveles altos de estrés.
Sobrepeso u obesidad.
El consumo de tabaco.
Los anticonceptivos orales.
Excesivo consumo de grasas saturadas.
Excesivo consumo de sodio (sal).
El consumo de alcohol.
El sedentarismo.

¿Cuándo debemos controlarnos la presión?

A partir de los 21 años, por lo menos una vez cada dos años.

¿Cómo podemos prevenir la Hipertensión Arterial?

Reducir el consumo de grasas y sal en las comidas
Controlar nuestro peso
Hacer actividad física regularmente, aunque sólo sea caminar 15 ó 20 minutos al día tres días a la semana
Dejar de Fumar
Evitar el excesivo consumo de alcohol
Reducir el estrés

Dislipemia:

Es la presencia de anormalidades en la concentración de grasas en la sangre (Colesterol HDL y LDL, Triglicéridos).

Es una patología llamada silenciosa, ya que sólo puede ser detectada a tiempo a través de análisis de laboratorio en el cual se mide la concentración de colesterol y triglicéridos circulantes.

Es importante destacar que la Dislipemia conforma el grupo de patologías de alto riesgo cardiovascular, que si no se detectan a tiempo, pueden desencadenar en manifestaciones graves como derrames (enfermedad cerebrovascular) o infartos (cardiopatía isquémica).

¿Cuáles son las causas más comunes de la Dislipemia?

Alimentación inadecuada (alimentos ricos en grasas saturadas, en azúcares simples y grasas trans)
El sedentarismo.
El consumo de tabaco.
El consumo excesivo de alcohol.
Altos niveles de estrés.
Sobrepeso u obesidad.
Diabetes.
Hipotiroidismo.
Antecedentes familiares.

¿Cuáles son los síntomas?

No suelen existir síntomas aunque pueden aparecer depósitos de grasa en la piel o en los tendones. Puede aparecer dolor abdominal, pancreatitis, fatiga, zumbido en los oídos si los niveles de triglicéridos son altos.

¿Cuáles son las complicaciones de la Dislipemia?

Infartos
Infartos cerebrales
Pancreatitis

¿Cómo podemos prevenir la Dislipemia?

Alimentación adecuada
Evitar el consumo excesivo de alcohol
Actividad física

Diabetes

Es una enfermedad crónica que aparece debido a que el páncreas fabrica menor cantidad de insulina que la que el cuerpo humano necesita, o comienza a fabricarla con una calidad inferior.

La insulina es una hormona producida por el páncreas que es la principal sustancia responsable de mantener los valores adecuados de azúcar en sangre. La misma permite que la glucosa sea transportada al interior de las células, de modo que éstas produzcan energía o almacenen la glucosa hasta que su utilización sea necesaria. Cuando esta falla se origina un aumento excesivo del azúcar que contiene la sangre lo que se llama hiperglucemia.

Existen tres tipos de Diabetes:

Diabetes tipo 1

Aparece generalmente en la infancia, la adolescencia y los primeros años de la vida adulta, de forma repentina y muchas veces sin que haya antecedentes familiares.

Se debe a la destrucción progresiva de las células del páncreas, que son las que producen insulina por lo que esta tiene que administrarse artificialmente desde el principio de la enfermedad.

Síntomas:

Sed
Aumento de la cantidad de orina
Cansancio
Pérdida de peso

Diabetes tipo 2

Suele presentarse en edades más avanzadas y generalmente la sufre o han sufrido algún miembro de la familia.

Se debe a una producción de insulina escasa, junto con el aprovechamiento insuficiente de la misma por parte de la célula. Según qué defecto de los dos predomine, se tratará con pastillas antidiabéticas, con insulina o con una combinación de ambas.

Síntomas:

No suelen presentarse ningún tipo de molestia ni síntoma específico, por lo que puede pasar desapercibida para la persona afectada durante mucho tiempo.

Diabetes gestacional

Este tipo es considerado como una diabetes ocasional y se puede controlar igual que a los otros tipos de diabetes. Durante el embarazo la insulina aumenta para incrementar las reservas de energía pero a veces este aumento no se produce y puede originar una diabetes por embarazo. Síntomas:

Este tipo tampoco tiene síntomas y la detección se realiza casi siempre tras el análisis rutinario a que se someten todas las embarazadas a partir de las 24 semanas de gestación.

Síntomas asociados a la Diabetes

Frecuencia en orinar.
Hambre inusual.
Sed excesiva.
Debilidad y cansancio.
Pérdida de peso.
Irritabilidad y cambios de ánimo.
Sensación de malestar en el estómago y vómitos.
Infecciones frecuentes.
Vista nublada.
Cortaduras y rasguños que no se curan, o que se curan muy lentamente.
Picazón o entumecimiento en las manos o los pies.
Infecciones recurrentes en la piel, la encía o la vejiga.

¿Cuáles son las complicaciones de la Diabetes?

Enfermedades cardiacas
Trastornos óseos y articulares
Problemas en los riñones, en los pies y en los ojos
Problemas en la piel, aparato digestivo, disfunción sexual y problemas en dientes y encías

¿Cómo podemos prevenir la Diabetes?

Adoptando hábitos de vida saludables
Con una dieta alimentaria sana, evitando el sobrepeso y la obesidad
Realizando ejercicio físico de forma regular
No consumiendo tabaco y bebidas alcohólicas

Sobrepeso y Obesidad

Según la Organización Mundial de la Salud el sobrepeso y la obesidad se definen como una acumulación anormal o excesiva de grasa que puede ser perjudicial para la salud.

Un indicador simple que relaciona el peso y la talla de una persona es el índice de masa corporal (IMC) y se utiliza frecuentemente para identificar el sobrepeso y la obesidad en los adultos.

Se establece que:

Un IMC igual o superior a 25 determina sobrepeso.

Un IMC igual o superior a 30 determina obesidad.

¿Cuáles son las causas del Sobrepeso y la Obesidad?

Antecedentes genéticos por problemas con el metabolismo
Sedentarismo
Trastorno en glándulas endocrinas
Malos hábitos alimenticios

¿Cuáles son los síntomas?

Fatiga o respiración entre cortada durante la actividad normal.
Aumento visible de grasa y peso en el cuerpo.
Pies aplanados y con callosidades.
Hipertensión arterial
Alteraciones psicológicas, desde ansiedad leve hasta pérdida de autoestima y depresión.

¿Cuáles son las consecuencias?

Enfermedades cardiovasculares
Diabetes
Enfermedades en las articulaciones

¿Cómo prevenimos el Sobrepeso y la Obesidad?

Con una dieta sana y libre de grasas, aumentando el consumo de frutas y verduras, así como de legumbres, cereales integrales y frutos secos.

Realizando Actividad Física periódicamente.