DEJAR DE FUMAR: SÍ SE PUEDE!

HOY ES UN BUEN DÍA PARA DEJAR DE FUMAR

Está en vos poner tu día D. Dejar de fumar es una decisión difícil pero saludable que te traerá muchos beneficios no sólo a vos, sino también a tu familia. Te dejamos algunos tips si estás pensando en abandonar el hábito.

5 claves para dejar de fumar:

Prepararse
•Buscar ayuda entre tus compañeros y familiares
•Consultar al médico para saber qué estrategia puede ser mejor para vos
•Aprender habilidades y conductas nuevas
•Estar preparado para las recaídas y situaciones difíciles


El consumo de tabaco es la principal causa de muerte evitable en el mundo. 
Mata a mas de 5 millones de personas al año y es responsable de la muerte de 1 de cada 10 adultos. Si no tomamos medidas rápidamente, esta tendencia se irá incrementando en el futuro.

Abstinencia de la Nicotina: Algunos tips para tener en cuenta...

Cuando los fumadores tratan de disminuir la cantidad de cigarrillos o dejar de fumar, la ausencia de nicotina origina síntomas tanto físicos como mentales.

Físicamente, el cuerpo reacciona a la ausencia de la nicotina. Estos síntomas alcanzan su mayor intensidad aproximadamente de 2 a 3 días más tarde y pueden durar desde unos días hasta varias semanas. Generalmente no más 3 a 4 semanas.

Los síntomas de abstinencia pueden incluir cualquiera de los siguientes:

  • Depresión. Tristeza.

  • Sentir frustración, impaciencia e ira. Inquietud.

  • Ansiedad

  • Irritabilidad

  • Trastornos del sueño

  • Dificultades para concentrarse

  • Dolores de cabeza.

  • Cansancio.

  • Aumento del apetito

    Muchos fumadores no experimentan la abstinencia y en otros no pasa de unas ligeras molestias.


    El día que dejes de fumar totalmente, tené en cuenta estos consejos:

  • Tomá mucha agua a lo largo del día, ayuda a acelerar la eliminación de la Nicotina del organismo, Crea una sensación de saciedad que disminuye las ganas de fumar y no engorda. Y, beber agua todo el día mantiene atareada la boca y las manos (algo que extrañan mucho los fumadores al principio).

  • Aprendé un sencillo método de relajación. Para intentar controlar la ansiedad que genera la la falta de Nicotina. Sentado cómodamente, con los ojos cerrados y respirando pausada y suavemente, lograrás alcanzar un grado suficiente de relax para conseguirlo. No obstante, puede que tus ganas de fumar sean demasiado fuertes. Contáselo a tu médico. El podrá te puede ayudar con algún método de sustitución de nicotina que se disponga (caramelos, spray nasal). Cuidado! Se trata de un medicamento con ciertas contraindicaciones. ¡Nunca se lo auto-recete!. Seguí la indicación de tu médico.

  • Contale a tus amigos tu decisión, para que te acompañen a su manera, de diferentes formas; pero sobre todo pediles que te animen, se acuerden de tu compromiso y no te ofrezcan cigarrillos.

  • Algo fundamental: Simultáneamente a dejar de fumar tené en cuenta que te ayudaría comer con moderación, evitar picantes, comidas abundantes y no comprar cosas para picar (chocolate, caramelos, bolsas de papas, etc.).

Te recomendamos que: Mastiques chicle sin azucar, comas bastoncitos de zanahoria, fruta o similar y comas caramelos sin azúcar.

¿Cómo puedo controlar el peso al dejar de fumar?

Muchos fumadores nos han compartido que uno de sus principales miedos al dejar de fumar es aumentar de peso, e inclusive puede ser un motivo que les impide tomar la iniciativa de intentarlo o bien una de las causas para volver a hacerlo.

¿Alguna vez te pusiste a pensar en esto?

Si bien es cierto que hay un aumento de peso que se asocia al dejar de fumar, éste ocurre durante los primeros 6 meses y en promedio suele ser de 4 Kg., sólo un porcentaje muy pequeño tiene un aumento mayor de peso.

A su vez existe medicación para dejar de fumar que ayuda a retrasar la ganancia de peso.

Es bueno saber con anticipación que la recuperación o el aumento de peso luego de dejar de fumar dependen principalmente de dos factores:

1.- El cuerpo de una persona que deja de fumar se desacelera y gasta menos energía y calorías para mantener sus funciones vitales y la temperatura corporal.

2.- Al aumento de la ingesta calórica, debido a que se come más. A esto contribuye, entre otras cosas, la recuperación del gusto y del olfato, que hace que los alimentos resulten más apetitosos y que el comer sea más placentero.

Les proponemos algunas estrategias para evitar este aumento:

  • Organizar la alimentación planificando cada una de las comidas con alimentos saludables, con suficiente cantidad de vegetales y reducidos en grasas.

  • Para momentos de ansiedad o hambre en donde se necesite reemplazar la oralidad del cigarrillo, evitar consumir caramelos y chupetines. Una buena opción es reemplazarlos por infusiones sin azúcar, agua o gaseosas light, alguna fruta, y variar entre estas opciones.

  • Elegir formas de cocción saludable como: a la plancha, horno, vapor, hervido, parrilla, papillote. Evitando de esta manera el añadido de cuerpos grasos como manteca, crema y aceite.

  • Realizar una actividad física continua contribuirá tanto al gasto de energía para evitar el aumento de peso como en atravesar la etapa de abstinencia.

¡Todos obtenemos beneficios si dejamos de fumar!

El cese del tabaquismo trae beneficios a las personas de todas las edades, incluso los que dejan de fumar después de los 65 años. Se sabe que luego de 10 a 15 años sin fumar, la mortalidad general de ex fumadores disminuye de manera gradual, y se aproxima a la de quienes nunca han fumado.
El riesgo de enfermedad cardiovascular disminuye con mayor rapidez que el de cáncer o de mortalidad general. Durante el primer año después de dejar de fumar se disminuye el 50% del riesgo de infarto, y en el transcurso de 2 – 3 años el riesgo de ex-fumadores de tener un infarto en el corazón, puede aproximarse al de quienes nunca han fumado.
Además, hay muchísimos otros beneficios que encuentran las personas al dejar de fumar: gastan menos dinero y pueden ahorrarlo o invertirlo en otras cosas; recuperan mayor gusto y olfato; mejora el rendimiento físico; la piel se vuelve mas suave y limpia, al igual que el cabello; el aliento, el olor en la ropa, el aroma de la casa, la pintura de las paredes, las cortinas, etc. todo recupera su fragancia y apariencia original.

¿Afecta el humo de tabaco a los no fumadores?images1F6JEJ0T

Si bien desde hace más de 45 años que se sabe que el tabaquismo es dañino para la salud, recién hace unos 20 años que se empezó a alertar a la población de que el tabaquismo pasivo también es un factor de riesgo para varias enfermedades.
El humo de tabaco en espacios cerrados es inhalado por TODOS, tanto fumadores como no fumadores quedan expuestos a sus efectos nocivos que pueden ser inmediatos o a largo plazo. Los efectos inmediatos podrían ser la irritación de los ojos, la nariz, la garganta y los pulmones, dolor de cabeza, náuseas y mareos. A largo plazo, la exposición involuntaria al humo del tabaco se asocia con complicaciones respiratorias, cáncer de pulmón y enfermedad cardiovascular.

En algunas personas, el tabaquismo pasivo empieza desde el momento mismo de la concepción y se prolonga toda la infancia con todos los riesgos que esto implica. Por ejemplo, los hijos de madres fumadoras tienen más probabilidad de nacer con bajo peso que los hijos de madres no fumadoras. Si estás embarazada y fumás, consúltalo con tu médico, él podrá ayudarte.

Ni la ventilación ni la filtración del aire, ni siquiera ambas combinadas, pueden reducir la exposición al humo de tabaco en espacios interiores, a niveles aceptables. Los entornos totalmente exentos de humo de tabaco ofrecen la única protección eficaz.